UN PASEO DE COMPRAS CON HISTORIA …

UN PASEO DE COMPRAS CON HISTORIA …

                              

                                                                                                                                                    Por: Luciana Escudero 

El Mercado Central de Buenos Aires es el principal centro de comercialización de frutas y verduras del país y uno de los más importantes de América Latina. A toda hora el flujo de personas y vehículos es interminable, es como una ciudad dentro de otra ciudad, que nunca duerme. Y es allí mismo donde escondida entre una inmensa arboleda, se encuentra el casco de la estancia Chacra de los Tapiales.

Esta propiedad nace en los primeros años de la colonia y tiene una historia muy particular, casi premonitoria; uno de sus dueños fue Martín Altolaguirre,  ingeniero agrónomo que trabajó en una empresa dedicada a la agricultura en el país, es decir que, desde sus orígenes, la chacra está vinculada al oficio de cosechar y vender lo que produce nuestra tierra. En 1808, por problemas económicos, Altolaguirre se ve obligado a vender sus tierras a Francisco “Pancho Ramos Mejía” iniciando así una larga historia que vincularía a los Ramos Mejía no sólo con la historia de esta estancia sino también con la del Partido de La Matanza.            

Por aquellos años, en los que se forjaba la patria, por sus galerías, cuartos y comedores, pasaron hombres  importantes de la historia argentina como Manuel Belgrano, Juan José Castelli, Mariano Moreno, los hermanos Liniers o el General Lavalle. Aunque poco reconocido en los libros de historia, cabe destacar que Ramos Mejía fue un protector de los pueblos originarios que vivían en estas tierras, en una época donde el prejuicio racial y el desprecio eran moneda corriente. Él tendió lazos con los pampas y los gauchos a quienes  trató como huéspedes, les enseñó los oficios del campo, el cultivo y la ganadería y se preocupó por su formación. Fue el representante de los caciques en el tratado de Miraflores con el gobierno provincial, un acuerdo de paz y amistad entre blancos e ‘indios’. Don Francisco murió en 1828 por la fiebre. Su cuerpo fue tomado por los pampas, que se lo llevaron al desierto para darle sepultura en un lugar que aún hoy permanece desconocido. La chacra de Los Tapiales fue confiscada por el gobierno de Juan Manuel de Rosas hasta la batalla de Caseros en 1852, año en que fue devuelta a sus legítimos dueños; la familia Ramos Mejía. Isaías De Elía, yerno de Francisco, se volcó entonces a la cría de caballos Pura Sangre de carrera y vacunos. Su nieto, Agustín, llegaría a ser intendente de La Matanza entre 1935 y 1941.

 En 1942, la chacra es declarada Monumento Histórico Nacional. Siguió perteneciendo a la familia Ramos Mejía hasta 1963, cuando por ley estas tierras fueron declaradas  de ‘utilidad pública’ para levantar el Mercado Central de Buenos Aires, Institución  que en acuerdo con la Comisión Nacional de Museos, se comprometió  a preservar el casco histórico el cual se mantuvo intacto.

Actualmente  se encuentra cerrado  al público, debido a las distintas tareas de restauración que se están llevando a cabo. Se utiliza como locación para películas y publicidades de época.

Dirección

Autopista Ricchieri y Boulogne Sur Mer (B1771BIA), Tapiales, Buenos Aires, Argentina.

Cómo llegar

En auto

Se encuentra a 2 km de Av. General Paz y Autopista Ricchieri, camino al Aeropuerto de Ezeiza (ver tarifas de peaje aquí). Bajar en la Salida N° 17 sobra la derecha y seguir el camino hasta el ingreso al Mercado Central.

Colectivos

Las líneas 8 (recorrido B) y 298 (recorrido B) entran al Mercado Central. Otras líneas que también recorren las afueras del Mercado son: 8, 56, 86, 91, 92, 298 (Cartel x Celina), 143, 162, entre otras.